domingo, febrero 26, 2006

Fraudes en la ciencia: Física.

Los mentirosos:

En 1999 Victor Ninov del Laboratorio Nacional Berkeley de EE UU presentó unos resultados que indicaba la creación de los elementos superpesados 116 y 118. En 2002, se confirmó que el científico había falseado ciertos datos. Ninov fue despedido y todos los coautores de los trabajos se retractaron de los resultados.

Jan Hendrik Schön, supuestamente había descubierto una forma de difundir corrientes eléctricas intensas en cristales semiconductores orgánicos compuestos de anillos de benceno, que originalmente eran muy pobres conductores.

Schon había publicado unos 60 artículos en entre 1999 y 2001, 15 de ellos en las revistas Science y Nature e incluso llegó a ser propuesto como candidato al Nobel.

La similitud de los gráficos publicados en distintos artículos levantó las sospechas hasta que finalmente se descubrió que había manipulado conjuntos completos de datos. Admitió haber cometido errores de los que se arrepintió profundamente a pesar de haber sostenido que todas sus publicaciones se basaron en observaciones, afirmando no haber guardado ningún libro de registros de los datos y borrado toda la información.

La fusión en frío se calienta:

En marzo de 2002, Rusi Taleyarkhan publicó en la revista Science un artículo en el que describía un experimente en el que había conseguido un proceso de fusión controlada (fusión en frío) mediante un sonoluminiscencia. Este proceso transforma las ondas sonoras en destellos de luz, enfocando la energía del sonido en un punto diminuto y parpadeante en el interior de una burbuja en la que se alcanzan temperaturas de decenas de miles de grados.

Experimentos posteriores intentando reproducir estos resultados han resultado vanos por lo que los resultados de Taleyarkhan han sido puestos en duda. En cualquier caso no se trataría de un fraude sino de una interpretación errónea de resultados. Sin embargo, el doctor Taleyarkhan insiste en la validez de los mismos y recientemente ha realizado experimentos ligeramente modificados que corroboran la interpretación original.

Probablemente el origen de las dudas en los experimentos de Taleyarkhan se encuentra en el chasco de la fusión en frío reportado por Stanley Pons y Martin Fleischman. En 1989 estos dos científicos anunciaron haber observado indicadores de procesos de fusión nuclear (el mecanismo que utiliza el Sol para generar energía) luego de hacer pasar una corriente eléctrica por una cuba electrolítica.

Presentaron los resultados en rueda de prensa en lugar de en una publicación cientifica y ocuparon durante semanas portadas de periódicos. Sus resultados no pudieron ser reproducidos y finalmente un comité del Departamento de Energía de los Estados Unidos concluyó que no existía evidencia alguna de fusión fría.